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Terminó la temporada de juego pero empezó la de trabajos en la cancha. El proceso de aireación es importante para darle un respiro al césped después de toda la presión recibida durante el año.
Se vienen las aireaciones
Parte 1 - Elección de púas.
Terminando la temporada de juego se aproxima la época para realizar una buena aireación con púa hueca que logre 3 efectos:
1. Airear 2. Des-compactar 3. Cambiar suelo arcilloso y materia orgánica por arena
La aireaciones con púa sólida que venimos realizando sólo logran airear pero no des-compactan ni modifican la textura del suelo ni su contenido de materia orgánica. Ya en el receso podremos “castigar” la cancha con toda la batería de tareas que no podemos realizar durante el transcurso del torneo: la aireación con púa hueca mencionada, arenado pesado, vertical y control de malezas. Todo en diciembre. Intensivo. Luego, fertilización, riego, corte y descanso para llegar bien al inicio de la temporada.
Hoy por la mañana probamos púas en Huracán con la Vertidrain 7316. La púa más grande de 2.5 x 25 cms hizo un trabajo maravilloso y permitirá cambiar un importante volumen de suelo en una cancha que no lo mejoró por años y tenía un feroz ataque de “black layer” o capa negra. La púa más fina de igual largo no funcionó por la gran plasticidad (alto contenido de arcilla) del suelo y no sacaba tarugos.
Parte 2 - La recolección de tarugos
La tarea más resistida por lo dura, lenta y tediosa del mantenimiento de un campo deportivo es, sin dudas, recolectar los tarugos de una aireación. Esto invita a asesores y cancheros a tomar la mala decision de evitar la imprescindible aireación con púas huecas y hacerla con sólidas o triturar los tarugos y volver a incorporarlos a los agujeros. Pero existe una máquina que elimina la tortura de 10 personas rastrillando y paleando tarugos bajo el sol ardiente de 2 días de verano. La Core Collector recoge los tarugos y los vuelca en el volquete sin ensuciarse las uñas!